domingo, 10 de febrero de 2008

PREPARANDO LOS PECHOS PARA LA LACTANCIA

Preparación para el amamantamiento durante el embarazo
El periodo de amamantamiento no se puede improvisar.
La cantidad y la calidad de la leche después del parto depende del buen estado de salud de la madre. Los consejos higiénicos que recomendamos durante el embarazo, no sólo persiguen el tener un parto fácil y sin riesgos, sino también tener un buen amamantamiento.
Es muy importante que la madre esté bien informada sobre el arte de dar de mamar, así como de las soluciones a los posibles problemas que se le puedan presentar al respecto. Ya le dedicaremos a esto un apartado.Dos meses antes del nacimiento, la madre tiene que ir ya preparando sus pechos y pezones, de la siguiente forma:
1. Para que no se te resequen los pezones: no te los laves con jabón. Usa solamente agua, lo más pura posible. Para hidratarlos y suavizarlos, puedes untarlos con aceite de almendras dulces (de venta en farmacias) o con aceite virgen de oliva, menos en la punta.

2. Para que tus pezones se endurezcan y sean menos sensibles: una vez al día, después de levantarte, frótalos suavemente con una toalla limpia, o bien golpéalos de arriba a abajo, con el borde de los dedos.Puede ayudar también el hecho de llevar los pechos sin sujetador, de vez en cuando, permitiendo así la aireación de los pezones y rozamiento con el vestido (que, a poder ser, sea de fibra no sintética). Si esto no te es cómodo, puedes probar llevar sujetador de amamantamiento con las tapaderas abiertas (estos sujetadores tienen la función de sujetar los pechos dejando libres los pezones para dar de mamar.

3. Para que el niño pueda mamar con facilidad: tomar el pezón con el pulgar y el índice, y ...a) estirarlo y girarlo entre tus dedos, durante un par de minutos; b) estirarlo y mantenerlo estirado por unos segundos (hasta que se presente una ligera molestia).Todos ejercicios no deben ser nunca dolorosos. Al finalizar, aplícate aceite, siempre de oliva o de almendras dulces, menos en la punta.

4. Masaje de los pechos (dos veces al día), para que cuando des de mamar, baje mejor la leche (estimula la circulación y evita las obstrucciones) :
a) con ambas manos, rodea la base del pecho y apriétalo suavemente diez veces;
b) repite este masaje, acercando las manos hacia el pezón, otras diez veces;
c) apoya las yemas de los dedos, a los lados de la base del pecho y deslízalos hacia el pezón;
d) apoya los bordes de las manos, arriba y debajo de la base del pecho, y deslízalos hacia el pezón.Se puede untar el pecho con aceite para facilitar el masaje. Si antes se extrae el calostro, también facilitará el masaje.

5. Durante las dos últimas semanas, extraer un poco de calostro, para abrir los conductos de la leche, lo que facilitará las primeras mamadas y evitarás obstrucciones con la subida de la leche. Así sabrás ya como sacarte la leche, cuando se te llenen demasiado los pechos:
a) sostén el pecho con la mano izquierda. Con la derecha apriétalo hacia adentro.
b) repite el movimiento con los dedos, apoyados en diferentes lugares.No pasa nada si no lo consigues la primera vez. Con el tiempo conseguirás hacer salir al menos algunas gotas.

6. Usa un buen sujetador durante el embarazo. Que no sea ajustado y que sea cómodo. Que sea a poder ser de algodón blanco. Lavarlo con jabón suave y aclararlo bien. Evita absolutamente la lejía.Hacia el final del embarazo, procúrate dos buenos sujetadores de amamantamiento, para nutrir a tu bebé con toda comodidad,. Elígelos un poco grandes, pues el volumen de tus pechosaumentará con la subida de la leche.

1 comentario:

  1. es muy interesante lamentablemente yo no puedo darle mi pecho a mi bebé aunque tanto quiero no tenia primeramente leche luego que los pezones son pequeños y por ultimo que mi bebé ni quiere ya nada que ver con mi pecho y que tanto que lo intente... gracias

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